Maurice Masse, granjero provenzal ( Francia) de unos cuarenta años, que cultivaba plantas de lavanda fue testigo, de un encuentro del tercer tipo.
Automóvil francés Renault Dauphine |
Intrigado, avanza
lentamente hacia el objeto,y se da cuenta de que está colocado sobre un pie
cilíndrico, rodeado por otros 6 pies de menor tamaño. Mientras continúa su
acercamiento, ve a dos pequeños seres en cuclillas, que parecían estudiar un
brote de lavanda.
Sorprendido, Maurice Masse observa que estos seres no tienen
pelos, son de tamaño pequeño pero con cabezas desproporcionadas, y vestidos con
un traje ajustado en un tono gris azulado.
Llega a acercarse una corta distancia de ellos, ve a uno de
estos seres apuntando en su dirección un
tubo transparente que lo paraliza durante varios minutos. A pesar de esto, él
puede ver a los 2 seres, provenientes de otros espacios, terminar sus muestras
y escucharlos expresarse en sus lenguajes como chirridos.
Estos dos seres luego
permanecieron unos minutos discutiendo mientras me miraban la mayor parte del
tiempo. Noté que sus ojos se movieron y escuché una especie de sonido de
gorgoteo en su garganta. Casi no tenían cuello tanto que su cabeza había caído
sobre sus hombros. Parecían burlarse de mí, pero sus miradas no eran malas,
sino todo lo contrario.
Después de 4 a 5 minutos, regresaron, con sorprendente
agilidad, al aparato volador con la ayuda de la mano derecha y luego la izquierda.
Una vez a bordo, una puerta corrediza se cerró de forma que parecía automática,
de abajo hacia arriba, de la misma manera que la puerta de un mueble.
¨Los distinguí detrás de la cúpula, escuché un ruido
sordo que duró de 2 a 3 s. El tubo debajo de la nave se alargó de 10cm a 1metro
y salió del suelo mientras las 6 patas comenzaron a girar. No había humo o
polvo levantado por esta nave. Las 6 patas giraban en sentido horario.¨ ,
aseguró.
Maurice Masse nota que los pies del aparato se retraen, la
máquina gira y avanza a toda velocidad de forma asombrosa hacia el oeste.
¨Mientras los visitantes me miraban, la nave iba hacia
atrás, en dirección opuesta a su orientación. Subió oblicuamente más rápido que
un avión a reacción. Lo seguí durante 15 a 30 m, y de repente desapareció de mi
vista, peor que un destello¨, dijo.
¨Me quedé quieto por 15 minutos, luego moví mis manos,
luego todo el cuerpo y las extremidades. Entonces me fui a mi tractor.¨, contó.
Maurice recuperó su movilidad unos minutos después de la
salida de la máquina y se dirigió inmediatamente al lugar donde se encontraba
este Ovni. Observó rastros en el suelo, como un orificio redondo de 30 cm de
profundidad, correspondiente al pie cilíndrico principal de la nave. También
nota que la naturaleza misma de la tierra había cambiado.
Durante los años posteriores a este aterrizaje, los brotes
de la lavanda nunca pudieron volver a crecer y se detectaron rastros de
radioactividad. El suelo está vitrificado, las plantas de lavanda quemadas y
radiactivas. Su campo se convertirá en un sitio de construcción, un centro de
laboratorio y la vida de Mauricio, una verdadera prueba ...
Posteriormente, los gendarmes, que investigaron este caso,
concluyeron en la veracidad de los hechos.
La investigación revelará la presencia, en el lugar donde
estaba el aparato, de una huella clara, así como el hecho de que la tierra en
este lugar se marchitó y se endureció, mientras que en todas partes, estaba
húmeda y suelta.
Otro punto interesante es que esta observación es lo similar
a otro caso acaecido en Estados Unidos y conocido como "el encuentro delsocorro", del 24 de abril de 1964.
La investigación dejó claro que en este caso excepcional una
nave alienígena aterrizó en Valensole la mañana del 1 de julio de 1965.
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